miércoles, 25 de junio de 2008

Otro día más

Saludos chicas/os. Aqui estoy otro día más, buscando algo que escribir entre tantos pensamientos.
Antes de nada quiero agradecer vuestras visitas y comentarios, pues pensé que nadie me escribiría y ya tube cinco comentarios. Muchas gracias.


Siento que el dolor me abrasa
Pero no sé detenerlo,
Y aunque me dijeron que todo pasa;
No termino de creerlo.

Hoy volví a recordar tantos momentos,
Tantas historias contigo,
Que solo se quedan en lamentos
Porque ya no estas conmigo.

No te culpo de sentir lo que siento,
Ni tan solo puedo odiarte.
No me quedan fuerzas para llorar
Ahora quiero dejar de recordarte.

Busco en un cajón mi salvación,
Ni es ángel, ni será oración.

Busco en un cajón mi salvación.
Es mi ángel, y por siempre mi oración.

Al principio sentía miedo
Pero el dolor me hizo comprender,
Que no hay peor dolor
que el que te despierta cada amanecer.

Ahora su hoja me da consuelo
Y no hay nadie que me pueda molestar,
En ella encuentro el remedio
A este eterno y doloroso pesar.

jueves, 19 de junio de 2008

Sin poder dormir


Son las 12:46 y hace poco que me he levantado. Me dormí a las 6:45, no podía dormir, y tampoco he dormir mucho.
Antes los sueños me consolaban, ahora parece que ya no me queda ni eso. En fin...
Ayer me estube planteando por que escribo este blog, y porque empezarlo ahora. Bueno, os dejo un test que he visto en muchas páginas de princesas. Creo que los resultados son algo preocupantes. Lo he puesto a la derecha, ya lo vereis.
Sigo preguntandome si, como siempre, estas palabras iran al aire y nadie estará ahi para leerlas. Queda la esperanza.
Os dejo tambien una canción, la letra, que me gusta mucho.
Saludos a todos aquellos que os aventureis a leerme.




Y la canción...

Promesas - Conchita

Prometí no cantarte ni una mas,
Prometí no volver a buscarte.
Prometí descartarte de mi mente
Arrinconarte en un lugar perdido.
Y todos y cada uno de los días,
Te hago un funeral en vida.
Olvidando, aquello que iba mal
Y recordando, aquello que no hacías.

Te hecho de menos, lo ves
Y otra vez vuelvo a perder
Te hecho de menos, lo ves
Y cada dia que pasa es otro menos sin su piel
Te hecho de menos, lo ves..
Otra vez vuelvo a perder..
Te hecho de menos, lo ves, lo ves, lo ves, lo ves..

Perdonaras que no cumpla mis promesas..
Pero cuesta abandonar la espera..
Entenderás que no logre acostumbrarme..
Es que es difícil, hacerse a la idea..
Y todos y cada uno de los días,
Te hago un funeral en vida..
Olvidando, aquello que iba mal,
Y recordando, aquello que no hacías..

Te hecho de menos y lo ves..
Otra vez vuelvo a perder..
Te hecho de menos, lo ves, lo ves, lo ves, lo ves..
Y podré estar sin ti..
Si vuelves que no sea solo por calmar mi dolor..

Y podré estar sin ti..
Aunque con esta herida aprenderé a sobrevivir..
Y ahora vete..
Márchate..
Lejos donde no te pueda ver..
Porque duele..
Márchate..

Te hecho de menos, lo ves..
Otra vez soy yo quien vuelve a perder..
Te hecho de menos lo ves, lo ves..
Y cada dia que pasa, es otro menos sin su piel..
Te hecho de menos, lo ves..
Otra vez vuelvo a perder..
Te hecho de menos, lo ves, lo ves, lo ves, lo ves..
Te hecho de menos, lo ves..
Y otra vez vuelvo a perder..
Te hecho de menos lo ves..
Y cada dia que pasa, es otro menos sin su piel..
Te hecho de menos, lo ves..
Y otra vez vuelvo a perder..
Te hecho de menos, lo ves, lo ves, lo ves, lo ves..

miércoles, 18 de junio de 2008

Bienvenidos

No pretendo que leais lo que aqui voy a escribir, no quiero, en caso de que lo leais, que le pongais nota, porque no escribo para entretener a nadie más que a mi, ni busco la gloria entre mis palabras.
Quiero que entendais, que hoy, y en lo sucesivo, leereis las palabras que mi mente escribe y mi alma llora.
Bienvenidos pues, a mi alma.

Me desperté temblando, encogido por el frío, petrificado por la tristeza y llorando en el olvido. Me desperté temblando en mitad de sueños que gritaban su nombre entre imagenes inconexas y sin demasiada lógica.
Me levante de la cama despues de comprender que aquella noche, como tantas otras, ya estaba perdida.
Encendí la luz con el miedo de la falsa ilusión, y volvía a apagarla. Dañaba mis ojos.
Caminé por el pasillo, despacio, pensativo, exhausto por todo. Malditos recuerdos, que como demonios castigaban mis sueños y lastimaban mi vida. Cerré los puños con fuerza y grité en silencio. No quería despertarlos. Ellos eran demasiado jovenes, yo demasiado estúpido. No era capaz de hacerlos feliz. Como iban a serlo si yo llevaba tanto tiempo sin sonreir?
Me acerqué a una fotografía que lucía tras un marco envejecido. En ella salíamos los cuatro, felices, en un día de playa. Le gustaba tanto el mar.
Dejé caer el marco y rompí a llorar.